miércoles, 22 de julio de 2009

El índice Big Mac

Un retorno al post económico. Vamos a ver qué sale.

El tipo de cambio es un instrumento económico que tienen los gobiernos. Marca qué poder de compra tiene una moneda con respecto a otra. En otras palabras: cuántos pesos (en el caso argentino) hacen falta para igualar a un dólar, por ejemplo. O a un euro. En este mismo momento, hacen falta $3,84 para tener un dólar y algo así como $5 para tener un euro.

Puede ser fijo o flexible. El gobierno de cada país decide. O al menos así debería ser, si no existieran presiones de organismos internacionales. En los ´90 por ejemplo teníamos un tipo de cambio fijo: un peso equivalía a un dólar. Hoy en día es un tipo de cambio flexible: todos los días escuchamos en los noticieros a un gil mostrando la pantallita de a cuánto está el dólar para la compra y para la venta (obvio que siempre es más caro para la venta, así es negocio para las casas de compra-venta de monedas).
Algo curioso es lo poco que se entiende de todo lo que se habla: por ejemplo, pocos deben saber (como yo tampoco sabía hasta hace poco) de qué carajo depende a cuánto esté el dólar. Buen, depende de la cantidad de dólares que haya en el mercado de divisas, es decir se da el libre juego de oferta-demanda de divisas y de eso depende el valor del dólar. Como marca la ley de demanda, cuantos menos dólares hay más caro se cotizan. Hasta que es modificado por, por ejemplo, el Banco Central comprando dólares (es decir sacando dólares de circulación para que haya menos y se coticen más alto), como está pasando hoy en día.

OK, me fui un poco. Que el tipo de cambio sea flexible tiene sus ventajas y desventajas y que sea fijo también tiene las suyas de cada uno. Hoy en día es flexible en prácticamente todo el mundo, lo que quiere decir que cada país dice con cuánto de su moneda se compra tal moneda extranjera. En Argentina de lo que más se habla es del peso-dólar, en la que perdemos por casi 4 a 1. Pero por ejemplo el euro está más caro que el dólar, lo que quiere decir que se necesita más de un dólar para comprar un euro.
En fin, quedamos entonces en que cada país tiene su tipo de cambio y tomando una moneda extranjera de referencia, supongamos el dólar, se dice que TAL moneda de TAL país está sobre-valorada o sub-valorada. O en la valoración perfecta. Hay miles de indicadores que nos dan esta respuesta y uno de ellos, bastante curioso, se llama el índice Big Mac.

El índice Big Mac, lejos de ser chiste, fue propuesto posta por la revista económica más prestigiosa del mundo, "The Economist", de Inglaterra. Este indicador se basa en la PPP: la paridad del poder de compra (Purchase Power Parity, por sus siglas en inglés). Esta teoría del PPP dice que un bien que vale X cantidad de, supongamos, dólares, en un país, tiene que poder ser comprado con esa misma cantidad de dólares en cualquier país del mundo. Es decir que el tipo de cambio se tiene que adaptar a eso. Al que le sirva más entenderlo así: el precio del big mac en dólares es la constante, el precio del big mac en moneda local es la variable independiente, y el tipo de cambio la variable dependiente.

En este caso ese bien que se toma como referencia es el Big Mac (sí, el de McDonald´s), porque existe prácticamente en todo el mundo. Así que supongamos que un Big Mac sale 2 dólares. Si acá saliera 8, el tipo de cambio debería ser, según el índice Big Mac, 4 pesos por dólar. Así se arma una tablita con los datos de cuánto sale un Big Mac en moneda local, cuánto en moneda extranjera, se calcula el supuesto tipo de cambio y se anota el tipo de cambio que tiene ese país en realidad. Y por último, comparando los tipos de cambios, supuesto y real, se dice si la moneda de ese país está sub o sobre-valorada, y en cuánto porciento. La tabla posta y actualizada hace unos días la pueden ver acá. El significado de lo que quiere decir cada columna lo acabo de escribir.

En fin, cada gobierno tendrá sus razones para tener el tipo de cambio que tienen: nosotros por ejemplo, como dice la tablita, mantenemos el peso sub-valuado (o el dólar sobre-valuado, que es lo mismo) para favorecer las exportaciones. Otro día se podrá discutir qué modelo de país queremos, si nos conviene posta o no exportar tanto, qué tiene de bueno, qué tiene de malo, a quiénes favorece y hasta cuándo es posible. Me pinta aclarar que para mí no, no es conveniente el modelo, pero buen... quedará para otro día.

Cualquier acotación, duda, crítica, lo que mierda sea, al msn. Gracias.

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